

Rusia y Bielorrusia empiezan ejercicios militares conjuntos bajo la mirada inquieta de la OTAN
Rusia y su aliado clave, Bielorrusia, empezaron el viernes ejercicios militares conjuntos bajo la mirada inquieta de la OTAN, después de que Polonia acusara a Moscú de agravar las tensiones con la intrusión de drones en su espacio aéreo.
Las maniobras, llamadas "Zapad", tienen lugar cada cuatro años y se extenderán hasta el martes. Las de este año coinciden con el avance de las tropas rusas en Ucrania, donde intensificaron los bombardeos en las grandes ciudades del país.
Rusia, que lanzó una ofensiva militar en el país vecino en febrero de 2022, anunció que derribó 221 drones ucranianos a lo largo de la noche, en uno de los mayores ataques de Kiev desde el inicio del conflicto.
"Las maniobras conjuntas estratégicas de las fuerzas armadas rusas y bielorrusas (...) han comenzado", indicó el Ministerio de Defensa ruso en un comunicado difundido este viernes.
Los ejercicios se desarrollan cerca de Borísov, al este de Minsk, la capital bielorrusa, indicaron las autoridades de ese país. El ejército ruso también indicó que algunas "acciones prácticas" se realizarán en Rusia, en el mar de Barents y en el mar Báltico.
La organización de estas maniobras genera preocupación en el flanco oriental de la OTAN. Polonia, Lituania y Letonia, todos miembros de la Alianza Atlántica y vecinos de Bielorrusia, permanecen en alerta máxima.
El primer ministro polaco, Donald Tusk, advirtió de "días críticos" para su país y Varsovia ordenó el cierre total de su frontera con Bielorrusia hasta que terminen las maniobras. Lituania y Letonia, a su vez, también anunciaron cierres parciales de su espacio aéreo.
Las tensiones con Moscú alcanzaron un punto máximo con la incursión la madrugada del miércoles de unos 20 drones en el espacio aéreo polaco, que obligó a movilizar las defensas antiaéreas de la OTAN. Varsovia consideró que fue una incursión deliberada, lo que Moscú rechaza.
Las maniobras de este viernes son "ejercicios planificados, no están dirigidos contra nadie", declaró el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
- Misiles Oreshnik -
Pero el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, puso en duda las intenciones de Moscú y dijo que los ejercicios no eran "defensivos" y "no solo apuntan a Ucrania".
Las maniobras Zapad suelen organizarse cada cuatro años y las de este año son las primeras desde el inicio del conflicto en Ucrania. Las últimas, celebradas en 2021, movilizaron a unos 200 000 soldados rusos unos meses antes del inicio de su ofensiva.
Sin embargo, se espera que los ejercicios de este año sean mucho más reducidos, ya que cientos de miles de soldados rusos están desplegados en Ucrania.
Bielorrusia afirmó en enero que 13.000 soldados participarían en las maniobras, pero en mayo indicó que ese número se reduciría a la mitad.
Según Tusk, el objetivo de las maniobras es simular la ocupación del corredor de Suwalki, que se extiende a lo largo de la frontera entre Polonia y Lituania, con el enclave ruso de Kaliningrado al oeste y Bielorrusia al este.
Este temor es una "absoluta tontería", reaccionó el presidente bielorruso, Alexander Lukashenko.
Por otro lado, el despliegue de armas nucleares tácticas rusas en Bielorrusia ha dado una nueva dimensión a las maniobras. Minsk dijo en agosto que las maniobras incluirían el nuevo misil experimental ruso con capacidad nuclear, llamado Oreshnik.
F.Koch--MP